Comer con la cabeza y con el corazón no es un capricho: es una brújula real. Hay días en los que pides ensalada y otros en ...
Los viajeros piden calma, luz suave y objetos con historia. Los dueños de casas rurales buscan reservas sin perder alma ni ...
Un cuerpo que protesta en silencio, una cabeza con nubes bajas, una tarde que pide algo más que café: ahí se cuela una taza ...
El aire se seca, el viento aprieta, los labios se agrietan en silencio. Es ese pequeño dolor que pincha al sonreír, ese gesto ...
La piel pide tregua en los cambios de estación. Tirantez por la mañana, brillo extraño a mitad del día, esa textura rugosa ...
Hay días en los que la casa parece un tablero de mandos que pita por todas partes: platos, mochilas, recibos, ropa. No es ...
Tu dormitorio debería ser un lugar que baje el volumen de la cabeza. Y aun así, llegas con el teléfono en la mano, la agenda ...
¿Comes sin darte cuenta de a qué sabe? Entre el móvil, el reloj y las prisas, el plato pasa por la boca como un trámite.
Los días se acortan, el salón se ve más gris a las seis y la casa pide abrigo. No hablamos solo de mantas: el color de fondo ...
En la encimera de la cocina se apila un pequeño ejército de tarros: el de los garbanzos del domingo, el de la salsa de tomate ...
Mover un sofá parece un gesto doméstico, casi aburrido. Pero a veces, esa pequeña sacudida al espacio abre una puerta mental ...
¿Y si el color que eliges para tu salón pudiera bajar el volumen del día? El verde no es solo “bonito”: cambia el pulso del ...